Serie producida por la BBC, de impecable factura y con una calidad excelsa, que parte de una idea nueva, los humanos encuentran una cura o un antídoto para que los muertos sedientos de carne humana vuelven a una apariencia de humanidad logrando la reinserción de los zombies.
La realidad es que a pesar de que vuelven con sus recuerdos, sus vivencias e incluso sus sentimientos, siguen sin ser humanos, y para tener un aspecto más humano usan lentillas y maquillaje, lo mismo que los humanos con los que conviven disfrazan su repulsión, su miedo, su intransigencia, sus convencionalismos sociales, su egoísmo, su afán de enriquecimiento explotandolos como si fueran ciudadanos de segunda clase, incluso con sus propios familiares que han resucitado y les demuestran su cariño y la necesidad de ser acogidos.
Crítica de una sociedad que se niega a adoptar los cambios, que huye y le atemoriza lo desconocido a pesar de que gran número de resucitados muestran su sensibilidad, sus ganas de reinsertarse para ser tratados como eran antes de sus muertes, con capacidad de expresar sus sentimientos, incluso de enamorarse.
Serie curiosa y que recomiendo a todos los amantes e incondicionales del subgénero que inició Romero, no les pesará y desde luego les sorprenderá.
Notable, 8.
El guionista Dominic Mitchell escribe y dirige su primera serie, "In the Flesh", una serie breve y original, que juega con los retornados (resucitados) y la discriminación social.
Aunque en el apartado técnico la serie es muy sencilla, sin ningún tipo de efecto especial, maquillaje sencillo, fotografía sobria… el gran punto fuerte de la serie, y donde lo apuesta todo, es en su trama. Utiliza a unos personajes que han retornado de la muerte, y deben reinsertarse en la sociedad para hacer paralelismos con la sociedad actual, en temas como la discriminación, la identidad, la aceptación y el trauma. Aunque su desarrollo es algo lento, el guion es bueno, consiguiendo ser reflexivo y conmovedor.
Para mí, con la primera temporada ya era suficiente. Aunque son solo tres episodios, muestra una buena historia, completa y conclusiva. En ella la metáfora entre los zombis y la discriminación LGTBI, aunque sea obvia, está muy bien realizada. En cambio, la segunda temporada se me hizo un poco más larga. No le vi mucha lógica al cambio de sentido de la serie, pero igual está bien. Y aunque aparentemente aparezca como "cancelada", cada temporada tiene su historia y su final, y tampoco le vería mucho sentido a una tercera, más allá de "estirar el chicle".
"In the Flesh" es de esas series que no te esperas, sencilla, breve y con una buena historia reflexiva.