Thriller de investigación periodística fundado en un caso de pena de muerte y realizado en menos de 24 horas, las previas a la ejecución del condenado.
Nuevamente Clint Eastwood produce, dirige e interpreta al periodista alcohólico y mujeriego que se encuentra de bruces metido en la investigación de un caso de pena de muerte cuya ejecución se va a producir en escasas horas. La interpretación la clava, no en vano tiene experiencia tanto con el alcohol como sobre todo con las mujeres, incluyendo precisamente en esta película a su amante, la actriz Frances Fisher y a la hija que tuvo con ella,Francesca Fisher Eastwood, la niñita que representa a su hija en la película.
Denuncia social de la pena de muerte manteniendo la tensión de la ejecución como espada de Damocles y además muestra, como en otras películas, una sutil y clara animadversión por la Iglesia Católica y sobre todo por sus sacerdotes, algo que hace en sus producciones cada vez que puede.
Gran ritmo narrativo, cuidada fotografía, gran banda sonora y típica película con el sello Eastwood, por encima de la media.
Notable, 7.
Las críticas destacan que la película de Eastwood aborda el tema de la pena de muerte de manera interesante, combinando un thriller bien ejecutado con un enfoque que no trivializa el tema. Aunque algunos consideran que la película pierde intensidad hacia el final y cae en lo comercial, las actuaciones y la narrativa mantienen su atractivo. Además, se valora la capacidad de Eastwood para tratar temas serios con humor y entretenimiento, aunque se sugieren cambios en la parte final para mejorar la tensión y evitar clichés.