La pasividad del pueblo judío en centro Europa ante el yugo nazi durante la II Guerra Mundial fue muy extendida, y muchos acabaron en los campos de concentración y de muerte por su confianza en Dios y en los hombres. Craso error muy extendido.
Sin embargo, un grupo de judíos bielorrusos, encabezados por 4 hermanos, lograron sobrevivir en los bosques haciendo frente a los nazis con sus propias armas, que les fueron robando a base de lucha, sangre, sudor y lágrimas.
Esta es su historia, basada en hechos reales, que se merece un sobresaliente 9, llena de héroes, desde el relojero que arreglaba las armas, hasta las madres que concibieron pequeños en ese horror de muerte y hambre, sin saber lo que les depararía el nuevo día, pero respirando vida cada día y dándole gracias a su Dios, que desgraciadamente les tenía olvidados.
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La pasividad del pueblo judío en centro Europa ante el yugo nazi durante la II Guerra Mundial fue muy extendida, y muchos acabaron en los campos de concentración y de muerte por su confianza en Dios y en los hombres. Craso error muy extendido.
Sin embargo, un grupo de judíos bielorrusos, encabezados por 4 hermanos, lograron sobrevivir en los bosques haciendo frente a los nazis con sus propias armas, que les fueron robando a base de lucha, sangre, sudor y lágrimas.
Esta es su historia, basada en hechos reales, que se merece un sobresaliente 9, llena de héroes, desde el relojero que arreglaba las armas, hasta las madres que concibieron pequeños en ese horror de muerte y hambre, sin saber lo que les depararía el nuevo día, pero respirando vida cada día y dándole gracias a su Dios, que desgraciadamente les tenía olvidados.