Película sorprendente tanto en su argumento, como en su desarrollo, como en su final, pero por razones bien distintas. Argumento soberbio con un guión bien desarrollado que atrapa al espectador, apoyado por las magníficas actuaciones de Plummer y Landau. Tiene partes magistrales (encuentro con policía nazi), pero hay algo que la impide ser una excepcional película: un final un tanto aséptico, frío, chapucero que resta calidad a la película. No obstante, recomiendo verla.