Una vez finalizada la II Guerra Mundial, llegó el momento del reconocimiento a los hombres que lucharon y vencieron en ella. Raoul Walsh, uno de los directores más laureados, dirige esta escuadrilla de aviones americanos con base en Inglaterra que participaron en el día D destruyendo objetivos para facilitar la invasión.
Sucintamente nos hablan de sus vidas, para que empaticemos con ellos, algo que no se logra en absoluto, aunque nos deja un buen puñado de combates aéreos con coreografías bastantes logrados, intercalándolos con documentales de lo verdaderamente ocurrido, dejando un resultado estimable.
Una más de barras y estrellas, de heroicidad y sacrificio muy en la onda estadounidense.
Interesante, 6.