Me ha encantado. De verdad. Mucho. Desde el principio me pareció genial y no aburre en ningún momento. No es una obra maestra pero he disfrutado mucho con ella; el guión es bueno, y es una tontería, pero me ha encantado cuando mencionan a Morrissey. ¡que vivan los infelices brillantes!. Wait, nunca es tarde.